Unidad de Equidad e Igualdad de Género de IPG explica la importancia del Día Internacional de la Visibilidad Trans
31 de marzo.- En el ámbito del “Día Internacional de la Visibilidad Trans”, que se conmemora en todo el mundo cada 31 de marzo, la Unidad de Equidad e Igualdad de Género del Instituto Profesional IPG, a cargo de Catalina Bandera Belmar, se refirió al objetivo de esta celebración que busca visibilizar, reflexionar y concientizar sobre las condiciones de vida y discriminación que sufren las personas trans a nivel global.
Para sensibilizar a nuestra comunidad al respecto, Bandera explicó que “necesitamos entender que todas las personas tenemos una identidad de género, siendo ésta la vivencia interna e individual tal como cada persona la siente profundamente, que incluye la vivencia personal del cuerpo”.
Dentro de este concepto, indicó que se pueden encontrar dos categorías y que son las más conocidas socialmente: “Las personas cisgénero, entendidas como aquellas cuya identidad de género coincide con su sexo asignado al nacer, por ejemplo, aquellas personas que se identifican como mujeres u hombres y que coincide con su sexo del acta de nacimiento.”
Por otro lado, se encuentran las personas trans, “cuya identidad no coincide con sexo asignado al nacer, es decir, la vivencia interna e individual de una persona puede ser distinta al sexo y nombre del acta de nacimiento, e incluso puede identificarse fuera de la norma social, que solo reconoce a los géneros femenino y masculino”, manifestó la experta.
Respecto a esta fecha, mencionó que “es un día para que se visibilicen distintas formas de identificarse como persona y que se reconozcan las discriminaciones que viven aquellas trans. Si bien contamos con un la Ley de Identidad de Género, que reconoce este derecho, aún nos falta avanzar en el trato cotidiano de estas personas”.
En esta línea, entregó una serie de recomendaciones para relacionarnos con ellas, sin estereotipos, evitando la discriminación:
- No asumir la identidad de género de una persona por su apariencia.
- Utilizar lenguaje neutral para respetar la identidad de género de cada persona.
- Respetar el nombre que utiliza.
- Respetar los pronombres con los que se identifiquen.
- Respetar las elecciones personales como por ejemplo vestuario, pelo, maquillaje, entre otros.
- Brindar espacios de escucha activa para el desarrollo de un vínculo respetuoso y de confianza.