Columna de Opinión: Gestión de recursos y el desarrollo sostenible
Por María Teresa Salazar Valenzuela, Jefa de Carrera Escuela de Gestión, Negocios y Marítima, IPG Sede Arauco
La gestión de la energía del agua y el desarrollo sostenible son considerados como algunos de los grandes temas macros de nuestro siglo.
Para profundizar más en el tema les comentaré lo siguiente:
El desarrollo sostenible implica dos ideas principales sobre las que existe un amplio consenso.
- El desarrollo tiene una dimensión económica, social y ambiental, y solo será sostenible, si se logra el equilibrio entre los distintos factores que influyen en la calidad de vida.
- La generación actual tiene la obligación, frente a las generaciones futuras de dejar suficientes recursos para que puedan disfrutar, al menos, del mismo grado de bienestar nuestro.
En síntesis, el desarrollo sostenible es la combinación de tres aspectos: Crecimiento económico, que favorezca el progreso, coherencia social, y respeto al medio ambiente, objetivos que al estar interrelacionados entre si obligan a tratarlos con un enfoque integrador y estratégico.
¿Pero qué papel juegan las empresas?
Las empresas contribuyen al desarrollo sostenible creando riqueza y bienestar social, por lo tanto, aumenta la calidad de vida de las personas. Pero a veces la creación de riquezas y bienestar social, se produce a costa de un deterioro del medio ambiente, una desigualdad en la distribución de la riqueza y un desarrollo económico a corto más que a medio y largo plazo.
Es indudable que un mercado cada vez más global y competitivo, las empresas que quieran ser reconocidas como sostenibles deben buscar de forma permanente la aportación de valor a sus inversores y al entorno social en el que operan y todo ello con un elevado nivel de protección ambiental.
Las empresas son básicamente organizaciones humanas que dependen de una red de relaciones internas y externas, vitales para su supervivencia y prosperidad, por lo tanto, de cómo se gestiones estas relaciones dependerá el éxito de la empresa.
¿Por qué deben ser sostenibles las empresas?
Las empresas modernas ya no se pueden conformar con una cuenta de resultados positivos, ni con dar beneficios a sus accionistas, ni siquiera con lograr la satisfacción de sus clientes, sino que deben estar muy pendientes del entorno donde desarrollan sus negocios, con especial atención a las expectativas de los grupos de interés, cada vez más heterogéneos mejor informados y más exigentes. El crecimiento del negocio e incluso la propia supervivencia depende de ellos.
Como conclusión puedo decir que la sostenibilidad empresarial consiste básicamente en mantener el equilibrio entre lo económico y la sustentabilidad medio ambiental y de esta forma obtener una ventaja competitiva en el mercado global, generando una buena reputación y ganándose la confianza de las personas que trabajan para una empresa y convivir de buena forma con el entorno próximo.